En el límite entre el centro de la ciudad de Madrid y el Verde, entendido como una única mancha (la Casa de Campo y el Campo del Moro), se encuentra Príncipe Pío. Es un punto estratégico a escala metropolitana, como estación intermodal; pero que por un lado da la espalda a la ciudad y por el otro se mantiene aislada del verde que la rodea.

La gran cantidad de infraestructura viaria y ferroviaria, tanto soterrada como a cota de calle -M-30, rio, A-5, la cuesta de San Vicente llegando a Plaza España, las múltiples líneas de metro y las de cercanías (con el inicio del corredor verde ferroviario)- han provocado que la estación intermodal se haya quedado cerrada en sí misma, sin relación directa con la calle.

Escala metropolitana

El punto de intervención se tiene que entender como frontera, ya desde esta escala, y como parte de una red metropolitana. Las áreas de influencia de cada punto intermodal se han ido ampliando, acompañadas por los aumentos de las velocidades de los medios de transporte:

– área urbana
– área metropolitana
– región metropolitana

Siendo estos puntos intermodales, los que catalizan los cambios de velocidad entre los diferentes medios de transporte (tren, metro, autobús, coches, bicicletas, peatones…)

Escala urbana

En esta escala se tiene que entender la Estación como…

– foco de intensidad urbana; cuyos usos y su relación con la ciudad y el territorio se han ido transformando.
– víctima; resultado de una serie de intervenciones a lo largo de la historia, en la que poco a poco ha ido perdiendo relevancia y adquiriendo nuevos usos, quedando como una estación residual.

Escala de barrio

La estación y el barrio donde se encuentra, aunque cerca del centro, están aislados por el fuerte desnivel existente (la cornisa de Madrid), y dispone de muy pocos equipamientos, encontrando entre ellos la falta de una biblioteca.

Tanto la estación como la infraestructura que la rodea, han evolucionado limitando totalmente la accesibilidad peatonal hacia el Campo del Moro y el río.

Por ello se propone una conexión en tres puntos:

– Grapar por debajo de la Cuesta de San Vicente desde la cabecera de la estación hacia el Campo del Moro.
– Aprovechar la conexión existente, el túnel de Bonaparte, que conecta el Campo del Moro con el Puente del Rey.
– Rehabilitar el Palacio de los Vargas, proponiendo un museo de la Historia de la Casa de Campo.

El acceso principal actual a la estación se traslada a la fachada de la Cabecera, la fachada de la ciudad, actualmente en desuso, planteando una nueva rótula=plaza que hace de nexo entre el verde y la infraestructura, de la misma manera que la estación hace de rótula entre la escala metropolitana y la de ciudad o barrio.

La Cabecera, colmata la fachada que da la cara a la ciudad, la fachada emblemática de la estación, que además por su funcionamiento interno, hace de transbordador de cota.

La grapa por debajo de la cuesta … la estrategia puntual

– Devolverle la importancia a la Cabecera, actualmente en desuso, como fachada de Ciudad y vestíbulo cultural.

– Vaciado de la plaza, creando una plaza en dos niveles, para conectar peatonalmente la estación con el parque y recoger la bajada peatonal desde la ciudad.

– Permeabilizar el Campo del Moro.

La apertura hacia el Campo del Moro, es acompañada por un uso cultural (Escuela de Cine) que aporta intensidad y se adecúa a la conectividad y ubicación estratégica de la estación intermodal y la falta de luz que supone situarse bajo tierra.

El uso de escuela, se combina con una biblioteca especializada en cine, que hace de nexo entre los usuarios de la escuela de Cine y los habitantes del barrio. Los vecinos carecen de un equipamiento de estas características.

Los usos se distribuyen de la siguiente manera:

– Edificio de Cabecera: vestíbulo expositivo y escuela de fotografía.

– Plaza que hace de rótula, se abre hacia el parque y entra a cota a la estación: zona dinámica, área de talleres de la escuela de cine.

– Entrando en el parque: zona de aulas y biblioteca (que hace de unión con el barrio); usos más estáticos que se alejan de la infraestructura y buscan la luz natural.

La conexión peatonal que entra al parque, hace también de gran vestíbulo público, exterior, dando acceso a los tres usos que cuelgan de ella: los talleres y la zona de aulas de la escuela de cine, y la biblioteca pública especializada en cine. La ejecución del vaciado se realiza intentando perturbar al mínimo la circulación. Se ejecuta en tres fases, creando tres puentes y se aprovecha el apoyo de la salida de la A-5 a la glorieta de San Vicente para no cortar del todo el tráfico rodado. Al entrar en el parque, se intenta diluir los límites (actualmente totalmente lineales), entrelazando el parque y la infraestructura.

La extensión de usos, da lugar a una gran superficie de cubiertas que se mezcla entre cubiertas vegetales (como extensión del parque) y cubiertas de zinc (extensión de la infraestructura y buscando el aprovechamiento de aguas). Esta mezcla no sólo se produce formalmente, sino también materialmente, dando lugar a dos tipos de estructura:

– Hormigón, in-situ y vigas TT prefabricadas: aguantando la infraestructura y albergando los usos más dinámicos (talleres y áreas de trabajo de la zona de aulas) y que menos luz requieren.

– Madera (pilares y vigas TT prefabricadas) y tierra: alejándose de la infraestructura, buscando espacios para actividades más estáticas, teóricas (en las aulas y la biblioteca).