El concurso planteaba una mejora urbana de la carretera que conecta Sant Cugat con Rubí. Nuestro proyecto pone en duda la necesidad de urbanizar una vía de tránsito rápido y reivindica un pasaje natural existente como alternativa peatonal.

Con el objetivo de dotar de más porosidad y conectividad ecológica a los municipios de Sant Cugat y Rubí, proponemos una transición lenta, en contacto con la naturaleza, como alternativa peatonal a la carretera de Rubí, que tiene una condición de vía rápida rodada. Este paseo incluye el Torrent dels Alous, un corredor hidrográfico tangente a la AP-7 que pasa justo por debajo de la carretera de Rubí. Potenciamos este parque fluvial, con una rica fauna y flora existentes, con operaciones de naturaleza reparadora para tejer la conexión con Sant Cugat e implementar la iluminación y los elementos de señalética para facilitar sus accesos desde distintos puntos.

Este anillo verde es un pasaje natural de unos 3 km que funciona como espacio de paso, ocio y deporte. En los extremos del anillo verde se encuentran dos equipamientos deportivos, con lo que proponemos potenciar el deporte al aire libre a su oferta deportiva. Los espacios que quedan debajo de los puentes de la carretera de Rubí se entienden como puntos de oportunidad para actividades efímeras como mercados temporales, espacios de creación artística y talleres medioambientales.

Finalmente se propone un proceso pautado de renaturalización de los bordes de la carretera de Rubí con el fin de integrar en el sistema verde esta vía rápida de conexión urbana.