Analizando el emplazamiento (orientación y desnivel) se propone dividir el solar en dos niveles: uno a nivel de calle y otro a tres metros por encima. Éste factor nos permite solapar parte del programa que a la vez nos permite conseguir una mayor densificación y ayuda a que se integre más las edificaciones vecinas. Aprovechar el desnivel del terreno nos permite separar el funcionamiento de bomberos y brigada; cada edificio puede funcionar de manera independiente.

Separar el programa permite un fácil acceso a los grandes espacios de cada uno de ellos y permite generar un espacio en común entre los dos edificios para poder maniobrar los vehículos. El programa más doméstico se sitúa en relación a la calle y en relación a la mejor orientación solar y vistas.